Smooth Talk (1985, Joyce Chopra)
todo lo que diga es spoiler.
lo interesante de este film es que amaga con algunas estructuras narrativas / temáticas pero las defrauda. desde el principio el peligro (ya en el cruce de calle sobresaturado de simbolismo, o los dos tarados musculosos en el shopping) parte de la moralización de la exploración sexual de una chica adolescente. descubrir(se) es peligroso, etc. una estrategia transitadísima: con la excusa pedagógica (e incluso seudo feminista) en definitiva se hace retroceder la sexualidad femenina al espacio del mal.
y sin embargo, la espada de damocles que recae sobre la jovencísima Laura Dern tiene dos dimensiones, y ambas son parte de la cultura oficial. por un lado, el puritanismo asfixiante (encarnado en madre y hermana, asfixiadas ellas mismas) y por otro lado, el hiper sexualizado cuerpo del varón joven de los cincuenta. que para la época de este film lleva treinta años reinventándose pero que aún fija sus coordenadas en el cuerpo de James Dean: la ropa, los gestos y las posiciones del violador replican (en un registro que se aleja solo de a poco de la emulación al grotesco) los posters en la habitación de la protagonista.
entonces, de manera poco sutil (lo consideraría un film de denuncia) lo que Dern aprenderá es que el peligro no es un latino que trafique drogas en el baño de un boliche, sino que la cara misma de la ficción rebelde anti sistema escondía no otra cosa que (lo que cuarenta años después llamamos) la cultura de la violación. el final, bravo e inteligente, prescinde de la espectacularidad: no hay asesinatos, ni incendios: la violación queda cifrada en una elipsis y dos charlas posteriores. en ambas charlas la idea es clara: el violador ha convencido a la protagonista que, revelada la cuestión, gravitará más la acusación sobre el deseo de ella que sobre la amenaza de él.
por eso son todas palabras claves. ella dice "yo salí" la hermana pregunta azorada y Dern inmediatamente recula. que la protagonista decida, cruzada por la rabia y la angustia, guardarse el secreto, entiendo yo, es la clave de la película: el secreto peor guardado (repito: que el peligro está en el corazón del sistema y no en sus márgenes) recae sobre los hombros de la víctima, que para salvar a su sociedad se atraganta de inseguridades y enojos, de manera que el padre pueda seguir siendo un pelotudo, y todos los demás, apenas, unos alienados.
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