I
tres tristes imperativos quiebran el siglo xx.
uno epistemológico: lo que es real, no es ficticio. lo que es ficticio, no es real.
uno estético: el buen arte ha de ser ficticio.
uno ético: todo lo demás, para ser bueno, ha de ser real.
como personas, no tenemos opción. el mundo nos increpa con una orden: sed reales. cualquier resto ficticio en el ser, debe ser denunciado: los mentirosos y psicóticos solo podrán redimirse en el universo del arte. no son de confianza. el mundo no debe quedar en
sus manos. peor: ellos mismos no pueden quedar en sus manos.
II
le théâtre que je voulais faire supposait pour être possible, pour être admis par l’époque, une autre forme de civilisation
artaud
III
psicóticos, mentirosos, traidores a la patria y a la revolución, subversivos, infiltrados, sospechosos sexuales. la larga caravana de acusados de ficcionar. delirantes, vendidos, posmodernos, cipayos... olvidar que todo lo real es ficticio y todo lo ficticio es real fue devastador. nadie estuvo libre de sospechas. La sospecha fue el elemento en común a los vivos. badiou llamó a esta tragedia passion du reél. la pasión por lo real, la sospecha de la que nos exoneramos sólo en y mediante la muerte.
IV
En una esquina vio Karl un cartel con el siguiente texto: “¡En el hipódromo de Clayton se contratará hoy, desde las seis de la mañana hasta la medianoche, personal para el teatro de Oklahoma! ¡Os llama el gran Teatro de Oklahoma! ¡Y llama sólo hoy, solo una vez! ¡El que ahora pierda la oportunidad, la perderá para siempre! ¡El que piensa en su futuro es de los nuestros! ¡Todos serán bienvenidos! ¡El que quiera hacerse artista, preséntese! ¡Este es el teatro que está en condiciones de emplear a cualquiera! ¡Cada cual tendrá su puesto ¡Felicitamos anticipadamente a todo el que se decida! ¡Pero daos prisa a fin de que seáis atendidos antes de la medianoche! ¡A las doce cerramos todo y ya no volveremos a abrir! ¡Maldito sea el que no nos crea! ¡Adelante, a Clayton!”
el teatro de Oklahoma estaba en condiciones de emplear a cualquiera porque cada quien actuaba de sí mismo. karl llega como técnico, lo contratan como actor, y actuará de técnico, siendo, a la vez, técnico. dicen que kafka comentaba, haciéndose el misterioso, que en el teatro de oklahoma, karl encontró su misión y su libertad
VI
la actuación es un desdoblamiento. quien actúa de rata, para ser buen actor, debe ser rata. si quienes observan ven un actor, no es una buena actuación. el que observa ha de convencerse de que observa una rata. pero: dejar de ser actor no es posible, no en este mundo (no sacrificaremos el materialismo). por lo tanto, quién actúa debe ser dos cosas a la vez. una es ficticia, y la otra es real. por eso el actor es peligroso, con su alquimia podría poner en riesgo los cimientos de lo real, que es, a su vez, la columna vertebral del paradigma ético y político. de allí la entretenida cárcel del teatro y el cine. el actor está acotado en tiempo y en espacio. se permite ser real y ficticio, lo que dure la obra, en la segura contención de la sala. la magia se admite y aplaude en el templo y se teme y se encierra fuera de él.
VII
benjamin observa los estudiantes creados por kafka. agotados, ascetas, sacrificados. los estudiantes en kafka no duermen. ¿para qué? ¿qué es lo que vale la pena vivir de esa manera, con una "actitud tan decidida, tan fanática"? dice benjamin: "quizás esos estudios no han significado nada. Pero están muy cercanos a esa nada que es lo único que torna útil al algo: es decir, al tao." en seguida, benjamin nos abandona ante una cita kafkiana oscura. dice que el objetivo de los estudiantes, es el mismo que perseguía Kafka con su deseo de... "clavar una mesa con habilidad paciente y minuciosa y al mismo tiempo no hacer nada, y no en forma que se pueda decir: Para él clavar no es nada, sino Para él clavar es un verdadero clavar y al mismo tiempo nada, con lo cual incluso el clavar sería aún más audaz, aún más decidido, aún más real y, si quieres, aún más loco"
VIII
no fué el primero, pero sí el más curioso. repentinamente nos encontramos en un bar. nos conocíamos de internet. me dijo que le molestaba lo que yo hacía. y que no lo haga más, y esto es lo importante: "porque no vas a querer un correlato en lo real, y yo necesito... -gesto indefinido con las manos- ...eso". con elegancia, me dijo cagón y me invitó a pelear. rechacé la oferta con toda la amabilidad que pude.
IX
más dulce, en otro universo, ella me dijo que lo que le gustaba de mí era cómo llevaba la diferencia entre el personaje de internet, y el personaje real. me gustó porque porque no dijo "y la persona real". más dulce y más inteligente.
X
los actores del teatro natural de Oklahoma actúan de ellos mismos, siendo -mientras actúan de ellos mismos- ellos mismos. "para ellos -escribe benjamin- en efecto, el clavar es un verdadero clavar y al mismo tiempo nada (...). Ellos estudian su papel, y sería un mal actor quien olvidase una palabra o un gesto de tal papel. Pero para los miembros de la compañía de Oklahoma ese papel es la vida precedente de cada uno”. De ahí la "naturaleza de ese teatro natural. Sus actores son seres redimidos" Entonces: del estruendoso "o" adversativo que separa lo real y lo ficticio, se independizan los actores del teatro de oklahoma. imaginados por kafka, leídos por benjamin, los actores contra-atacan copulando con un "y". están redimidos porque escaparon de los tres imperativos. hay una esperanza, después de todo. ¡Adelante, a Clayton!
XI
pero... la era de la reproductibilidad técnica hizo estragos el teatro de oklahoma. tardaron pocos años en instalar un televisor en cada casa. los músicos también fueron filmados. los futbolistas y los presidentes. por fin, llegó el día en que el valor de la entrada a un espectáculo de teatro, de cine, de música, tuvo un nuevo factor determinante principal. ya no es la habilidad de ser actor y rata, ni la maestría compositiva o interpretativa, sino qué tan famoso es quien aparece en el cartel, el músico, el equipo. no sobrevivió la rata, ni tampoco el actor. fueron reemplazados por un famoso. el famoso es un señor que actúa de ser él mismo, en todo momento. y todos quieren ser famosos.
XII
josefina la cantante, ni cantante, ni rata, (pero también, inevitablemente, cantante y rata) es el arquetipo de la famosa. dice que no puede trabajar, y ciertamente sabemos que no puede cantar. no es, por lo tanto, ni rata (nuestro pueblo es en esencia trabajador, cuenta el narrador), ni cantante. sin embargo, nos reunimos para oírla cantar (aunque sabemos que no canta), y no deja de trabajar (aunque se queje o pretenda no hacerlo).
XIII
¡El que ahora pierda la oportunidad, la perderá para siempre! el famoso ya no es actor. ha desaparecido el rastro de su existencia real, vive en el mundo de lo ficticio. tiene status de ficción, es personaje antes que persona. de ahí nuestro estupor al ver un famoso de cerca. "En el film -advertía benjamin- el hombre no reconoce su propio andar, en el gramófono no reconoce su propia voz". "la imagen te desfiguró” glosa patricio rey, “en este film, velado, en blanca noche”. no son, como nosotros, personas. son ficticios. el teatro pierde así su potencial amenaza: ahora son dos ficciones, una dentro de otra, o una mimetizándose con otra. sea lo que sea, ya no corre el riesgo de ser real mientras es ficticio. de ahí, repetimos, viene el estupor de estar cerca de un famoso. Verlo comer, reír, respirar, tener espesor, densidad, corporalidad, textura... es el cantante acercándose al público que lo toca, lo corrobora, se regocijan en su existencia real y ficticia. es él, sí. el famoso, el ser ficticio, imaginario, espectacular, pero también es esta cosa blandita, olorosa, rompible, finita. el placer, la emoción provocada por esta conjunción profana a los imperativos es enorme. record de desmayos en los recitales del rey del pop y frank zappa inmortalizado en su inodoro: no se olviden, nosotros también cagamos.
XIV
pero hay más. el famoso está libre de toda sospecha: quien es famoso no puede ocultarlo, ni fingir serlo quien no lo es. el primero se revela pronto como tal, el segundo provoca risa y lástima. o sea: el famoso también está muerto, en la medida en que es insospechable (más desmayos). invadieron la tierra imaginada y la llenaron de seres imaginarios, y nada más que imaginarios, echándonos a fuerza de pochoclos y escándalos. el teatro de oklahoma se llenó de personajes, despidieron a los actores y los reemplazaron con famosos. cada lugar del que se expulsó a un artista fue ocupado por una josefina. la ficción haciendo ficción. ¡Felicitamos anticipadamente a todo el que se decida! ¡Pero daos prisa a fin de que seáis atendidos antes de la medianoche! ¡A las doce cerramos todo y ya no volveremos a abrir! ¡Maldito sea el que no nos crea!
XV
La destruction de la conscience individuelle represente pourtant une haute idee de culture, c'est une idee profonde de la culture d'ou derive une forme toute nouvelle de civilisation. Ne pas se sentir vivre en tant qu'individu revient a echapper a cette forme redoutable du capitalisme que moi, j'appelle le capitalisme de la conscience puisque l'ame c'est le bien de tous.
XVI
juan cruz me preguntó si para publicar en la revista quería usar mi nombre o mi seudónimo. me reí con ganas. seudónimo? seudónimo usaban unos señores que portaban bastones y vivían en no sé qué torres, y también sus amigos que querían concientizar de no se qué a no se quiénes. seudónimo? no sé que es eso. lo único que tengo es un nick. eso sí. un nick: lo que usás para registrarte en una página porno, el nombre por el que se dirigen a tu wizzard en un MMORPG de LOTR. es el plusvalor que se agrega a cada palabra que escribís en el fotolog, en el blog, en el foro. y maldito sea el facebook, la recuperación del control ético de identidades en internet. por otro lado: en qué reside el éxito de twitter, sino en sus características que facilitan la constatación de la existencia de famosos, digo, de su materialidad? el regocijo controlado y casero para aguantar la espera entre recital y recital.
XVII
¡Os llama el gran Teatro de Oklahoma! pero... quién es ese personaje que habla usando tus manos? ese que es uno mismo pero no del todo?. ese que sos vos cuando vos sos ese? quién es?¡cuidado! ahí llegan los ansiosos protestando, exigiendo la batería ametrallada de clonazepam del real. no falta nunca el que piensa que te acusa gravemente, al decir que actuás de manera diferente que en la vida "real". otros te piden el correo, o el nombre, o hasta un teléfono o un DNI para registrarte. son documentos con los que intentan sofrenar su miedo al hecho de que cuando escribís nick mediante, sos real y sos ficticio en un mismo momento, en un mismo lugar. y qué hay del monstruo insoportable, del terror anónimo de tebas? y qué hay de los trolls? ¡Todos serán bienvenidos! ¡El que quiera hacerse artista, preséntese! ¡Este es el teatro que está en condiciones de emplear a cualquiera! ¡Cada cual tendrá su puesto!
XVIII
en la tele una señora explica los peligros sexuales a los que se exponen nuestros niños al ingresar a la internet. internet: la plaza llena de violadores (no como en casa). económicamente, internet es otro tipo de terror, en el que no vamos a ahondar ahora (aunque tiene todo que ver). pero sabemos que los que están asustados, tienen amigos ejecutivos, legislativos, judiciales y "periodistas". y si no los tienen, los pueden alquilar. entre los éticamente indignados y los económicamente aterrorizados, y sus amigos, se conforma esa raza que nos alerta sobre los peligros de la internet. una de las tesis de estos bribones es que si dejamos que haya pornografía infantil en internet, incentivamos la producción de pornografía infantil y la prostitución de menores. es la genial tesis de atacar la demanda para frenar la oferta que tan bien les resulta en sus “guerras contra la droga". ¿y cómo perseguir a estos degenerados, si usan nicks, si son anónimos? tiene que haber una manera de identificar a todos los que participen en internet. urge tener a mano la persona real detrás de cada personaje ficticio. así podremos después ir a casa a mirar el video de britney vestida de colegiala, sabiendo que nuestros hijos están seguros viendo high school musical.
XIX
con alegría, en mi habitación, encarno la rata. y soy ella y soy yo (nunca josefina, siempre cachafaz devorando la gorra). entro al teatro de oklahoma, a la cité des rats y a los tortazos, y junto a otros millones de híbridos, vamos inventando la internet. el teatro virtual. esquizofrénicos, mentirosos, artistas, a mí. echemos a los policías de nuestra internet. mejor, hagámoslos desdoblarse con nosotros. la redención que la radio y teledifusión nos robó, hoy parece cercana. tan cercana que a veces creemos tocarla en el teclado con la punta de los dedos. qué nos importan los escépticos? sin llamarlos vendrán a nosotros para que les consigamos un link para bajar la última temporada de big bang theory, el último disco de justin bieber, los textos escaneados de gramsci, el acorazado potemkin. y ni siquiera estamos hablando de esos torbellinos de furia que merecerían un estudio dedicado exclusivo, como 4chan. apenas de los nicks que usamos para rolear un personaje en el world of warcraft. del nick que usamos en el foro de la escuela para compartir ideas, fotos, impresiones, para conseguir sexo, para mostrar las canciones de tu banda. y cuando empiecen a desplegarse las potencias de internet, cuando los nicks se organicen, más que nunca vendrán a exigir que no haya diferencia entre la performance virtual y la del "mundo real"[1]. más que nunca aullarán espantados, ante el caótico despliegue de nicks. sin piedad con ellos. hay que multiplicar los mails, ser uno y ser tres a la vez, o ser uno y ser otro. facebook? Twitter? si no queda otra, bueno, pero abrirse seis cuentas, ponerle a cada una un nombre distinto, y nunca el del DNI. desdoblar lo uno hasta que la palabra pierda sentido. ser otros, en el mismo momento en que se es uno. ser real mientras se es ficticio. el fake tendrá la última palabra ¡por fin! perdimos un siglo completo, aún cuando hubo alertas. vale la pena, y valdrá la pena intentarlo. el nick, ese ariete con el que podemos atacar el muro que separa lo real de lo ficticio. ¡Maldito sea el que no nos crea! ¡Adelante, a Clayton!
[1] en realidad, ya está pasando. entre los requisitos que la unión europea está pidiendo al mercosur para firmar un tratado de libre comercio, se cuenta la legislación para controlar los ISPs en todos los mercados relacionados.
* (la primera versión del siguiente texto apareció en el blog de bibliofyl, cuando fue estrenado, en el momento en que BBF revivía, luego del cierre debido a las amenazas cobardes de los abogados de CADRA-CAPIF a los estudiantes que ponían plata, tiempo y esfuerzo en hacer del saber, un bien público. esta nueva versión la publiqué en el Nº 04 de la revista del Centro de Estudiantes de Filosofía y Letras (vayan, pues, las gracias correspondientes en primer lugar a Scann y Canta, y en segundo, a Emiliano Andrés y la gente de la comisión de la revista). convencido de que esa revista debe cambiar, y mucho, doy un primer paso. por malo que sea, por inapropiado y exagerado, por inadecuadas que sean las citas y los autores usados, esto es lo mejor que escribí en mucho tiempo. no podemos esperar que la revista se desterritorialize de sus estratos panfletarios por sí misma, hay que intervenirla, hay que agenciárnosla, y eso es sólo la mitad de la tarea. luego habrá que evitar reterritorializaciones... )
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